Llegó por fin el día donde Mel Zelaya más conocido por el mariachi llegó a la frontera de Honduras, al fin, dijeron muchos pero no les duró mucho la alegría de que estuviese el ex presidente en Honduras, un par de metros, algunos minutos y regresó a Nicaragua.

Todo un Show montado para la prensa, para que se cumpliera el tan amenazante decreto del ex presidente que lleva más de 24 días diciendo que va a entrar a Honduras.

En días pasados intentó en otro show aterrizar sobre el aeropuerto a sabiendas que estaba bloqueados, varias horas después se descubrió que había sido un montaje preparado en Venezuela para hacer creer a la opinión pública mundial que el mariachi estaba a pocos metros de Honduras y que no lo dejaban aterrizar. Me hubiese gustado ver la cara de todos los presentes si hubiesen dejado aterrizar el avión o lo hubiesen obligado a aterrizar y comprobar que el ex presidente no estaba adentro, pero quién sabe por qué no dejaron aterrizar a ese avión.

La pregunta que todos se hacen es por qué no le permiten la entrada al ex presidente Zelaya. Está más que demostrado que la mayoría de los Hondureños no quieren a Mel y esta negativa me reafirma que todo este golpe ha sido un montaje.

Vamos a tener que seguir esperando para demostrar nuestra teoría. Por lo pronto el show de la frontera ahí sigue, no se sabe a ciencia cierta qué será lo próximo y pensamos que regresará a Managua para viajar el martes a Washington D.C. (lo tendré de vecino por unas horas) y seguir el show.

Hemos estado analizando los hechos ocurridos el día de hoy y pensamos que solo un pequeño detalle falló en este fraudulento y bien armado show y fue la participación popular. Ese pequeño detalle fue, a nuestro juicio, la causa por la que el ex presidente no se atrevió a pasar porque sería muy evidente que las fuerzas armadas no le iban a hacer nada y marchar solo con la prensa por todo Honduras y sin que nada le pasara iba a prestarse a confusión, por eso pensamos que se quedó ahí, justo en la frontera y esperando quien sabe qué. Bueno esperando que llegaran las masas populares, poco le faltó decir que llevaba las maletas llenas de dinero para pagar.

El pueblo Hondureño demostró en una multitudinaria concentración pública que no quiere a Mel Zelaya y yo me pregunto: ¿acaso este señor no sabe entender que su tiempo ya pasó?.

Es triste pero el poder llama. Esa sensación de sentir la fuerza en tus manos, de ver que todos llegan a ti y te ven con ojos diferentes, que todos te quieren saludar es muy difícil de abandonar, amén del dinero, los contratos, los negocios, comodidades, viajes y atenciones especiales que, una vez abandonado el poder, desaparecen.

No sé cuál sea el motivo real de Mel Zelaya para regresar al poder, si fuera el pueblo, el bienestar del pueblo como el mismo dice, entonces mejor que se quede tranquilo en su nueva vida de ex presidente derrocado y que, con los recursos que logró robar de su época dorada de presidente rehaga su vida quedando en el recuerdo de muchas personas que, de una manera u otra disfrutaron de este show que ya lleva demasiados días ocupando espacios en la prensa internacional.